Ni las posibles congelaciones, ni el frío polar de hoy, han conseguido que desistiéramos de salir y cantar nuestras canciones en la pitada, como cada viernes.
Nos temblaba un poco la voz, pero la armonía y las risas, nos han ayudado a dedicar el Resistiré al difícil pulso que Grecia está echando a los «todopoderosos» miembros de la Unión Europea.
Como Grecia, no nos vamos a cansar, nos vamos a mantener firmes y, como hemos comentado en la pitada, vamos a irles señalando la cuenta atrás que está próxima a comenzar.